También podría haber titulado este post “El inesperado éxito de una fan: Anna Todd o el mundo está loco, loco, loco…”
Según una entrevista que he leído aquí sobre esta chica, ella misma confiesa “no entender del todo su éxito“.
Ok, Anna, yo SÍ lo comprendo y te puedes ir preparando porque van a comerte viva.
Para quien no esté informado de lo que es el éxito editorial del momento, la novela After de esta autora norteamericana, voy a hacer un breve resumen…
Esta adolescente de Austin, Texas, es una chica aficionada a las cosas de adolescentes: la lectura de novelas románticas para adolescentes y los grupos de cantantes adolescentes para públicos adolescentes.
Parece ser que es muy fan del grupo One Direction y un día decidió dar rienda suelta a sus fantasías escribiendo un fan-fic.
Un fan fic es una ficción que escriben los fans de una obra para continuarla y extenderla. Utilizan a sus personajes favoritos para contar lo que sus creadores no llegaron a imaginar… o no se atrevieron a escribir.
Pues Anna Todd, muy fan de One Direction y sobre todo de su integrante Harry Styles, escribió la historia romántica que le hubiera gustado vivir con él y la publicó en Wattpad.
Con tanto éxito que, ahora, la chica es famosa y ha visto su obra publicada, convertida en best seller, traducida a nosecuantos idiomas… en fin, en la cresta de la ola literaria….
Mil millones de impactos en Wattpad, once millones de likes y cinco millones de comentarios según reza la publicidad del libro
Pero ya es mucho más, claro, por el efecto bola de nieve desde que su libro tiene versión impresa.
Pero a lo que voy… Anna Todd no tiene la culpa de toda esta payasada
Es solo una chica a la que su pasión de adolescente se le ha ido de las manos.
Y la máquina voraz de la industria editorial la devorará, la masticará y la escupirá cuando ya no pueda extraer de ella más proteína (léase pasta gansa).
Es fácil criticar a la autora y decir que su libro no tiene sustancia, que está mal escrito y todo eso.
No lo he leído, ni pienso hacerlo, pero lo estuve ojeando en una librería y al primer vistazo me di cuenta de lo que era: una novela mediocre, inacabada y sin apenas revisión por parte de sus editores para pulir el estilo narrativo.
Y me atrevo a decir que todo parecido con una obra literaria bien estructurada y equilibrada es pura coincidencia.
Porque una cosa suele ir acompañada de la otra y los editores que huelen dinero fácil no suelen reparar en minucias como la calidad de un texto.
Lo triste es que Anna es una chica que está en proceso de ser escritora, como lo están tantas personas de su edad. Yo mismo tengo a algunas de ellas en varios de mis cursos.
Es así de claro: muy probablemente van a cargarse la carrera literaria de esta chica que, tal vez, no ha escrito la mejor novela del mundo pero nada indica que no pudiera llegar a hacerlo algún día.
La mantendrán en la inopia hasta que ya no dé más de sí y la tirarán a la basura como un trapo sucio cuando no les sirva. Ojalá me equivoque.
Y creo que la más sorprendida en todo este asunto es la misma Anna Todd, que desde el inocente hobby de escribir la historia que le hubiera gustado vivir con su amor platónico, ha llegado a lo más alto del panorama literario actual…
Parafraseando a Groucho Marx: partiendo de la nada han conseguido auparla a las más altas cotas de la miseria.
Porque a pesar de que no defiendo a ultranza la elevada cultura que representan los libros y tampoco tengo a la literatura en el pedestal que otros le conceden, hay que reconocer que
vivimos en la era del entretenimiento estúpido y bobalicón
Y lo práctico de todo esto es…
Bueno, como no escribo un blog de opinión, ni de crítica literaria, sino que intento ofrecer siempre el mejor contenido útil para aspirantes a escritor, vamos con la lección que podemos aprender de esto.
Me gustaría diferenciar dos términos que se suelen confundir cuando se habla de editoriales:
- El sector editorial: el entramado donde tiene lugar la actividad económica relacionada con la publicación de libros (por simplificar)
- La industria editorial: es una parte del sector editorial que comprende la edición y publicación de libros como un negocio
El sector editorial abarca desde la publicación de poesía (nada lucrativa) hasta la edición de libros corporativos, restringidos a ámbitos específicos y muy reducidos.
La industria editorial vive de fabricar literatura de consumo; la calidad de lo que publica no siempre es su prioridad. Su objetivo es hacer dinero y cuanto más, mejor.
No voy a criticar, ni mucho menos, a la industria editorial. Es una maquinaria económica más, dentro de la maquinaria económica en la cual vivimos inmersos.
Lo que te recomiendo, a efectos prácticos es que
diseñes con cuidado tus estrategias de publicación y las encamines a conseguir lo que deseas…
No vaya a ser que por casualidad, accidente o despiste vayas a caer en la zona que no deseas.
¿Quieres llamar la atención de editores y agentes literarios con tu capacidad de convocar grandes cantidades de seguidores en las redes sociales?
¿Quieres atraer un selecto grupo de lectores identificados con tu estilo y con la calidad literaria de tu obra?
¿O prefieres autopublicar tu libro y prescindir de los métodos tradicionales, creando por tu cuenta una carrera literaria independiente?
Construye tu carrera con pies de plomo. Esto significa que…
Si lo que buscas es prestigio, no publiques cualquier cosa y de cualquier manera. Sopesa tus estrategias y cárgate de paciencia, que seguramente va para largo.
Si lo que buscas es fama y dinero, que adapten tu obra literaria al cine y esas cosas, preocúpate tanto de tu marketing como de la escritura. Y más del primero que de la segunda.
Mi recomendación personal es que, te decantes por la vertiente que te decantes, intenta siempre escribir un libro inmortal.
Por último, un recuerdo a los caídos
Es ilustrativa la historia del escritor estadounidense John Kennedy Toole.
Desesperado porque no encontraba editor para su novela La conjura de los necios, se suicidó.
Bueno… por eso y porque tenía episodios graves de depresión, claro.
Su madre, Thelma Toole, no descansó hasta que el autor Walker Percy leyó la obra de su hijo y consiguió que se publicara.
En 1981 ganó el premio Pulitzer de ficción y está considerado por muchos (entre los que me cuento) como una de las mejores novelas jamás escritas
Su otra novela, La Biblia de neón, publicada tras el éxito de la primera, demuestra el gran autor que perdió el mundo por no encontrar editor a tiempo…
El insigne autor de novelas y relatos de terror Edgar Allan Poe murió en la miseria, denostado y vapuleado por la crítica toda su carrera.
Herman Melville, autor de la obra maestra Moby Dick, no tuvo una carrera literaria precisamente gloriosa.
Y así podríamos seguir con unos cuantos más…
Pero gracias a las nuevas tecnologías, escritoras como Anna Todd o incluso como E.L. James y sus Cincuenta sombras de Grey tienen su pequeño rinconcito de gloria asegurado.
Si John Kennedy Toole levantara la cabeza… bueno, estoy seguro de que se reiría a carcajada limpia. Sería una carcajada algo inquietante, eso sí.
Y es que el mundo está loco, loco, loco…
¿Qué opinas de todo esto?
Deja tu comentario aquí abajo y debatimos… ¡gracias por leer y comentar!
me dusta escribir y mi lema es lo mas oculto esta a la vista. quien escribi por pasion quizas muera por devocion. pero como sabemos quien le gustaria nuestra historia para editarla. ya sabemos a que muchos no les gusta. por que de una u otra forma estamos en un mundo materialista. primero el dinero y por ultimo si acaso lo humano. bueno tengo tres manuscritos. y ya me han rechazado como cuatro veces. sigo escribiendo. estoy optando por publicarlo en amazon ¿que me recominedas.?
Soy una chica de quince años. He ido a clases de escritura y e descubierto que me encanta. Al parecer no soy tan mala. Entendí todo tu concepto, de verdad, pero ¿entonces no debo de precipitarme a escribir solo por que soy muy joven?¿Y si te sorprendo? Creo que puedo hacer algo diferente (Y debo confesar que sí, también escribí fan fiction), y para eso no debería importar la edad y seguir sin miedo de “arruinar” mi carrera. Le he puesto muchísimo esfuerzo a mi libro, aún no lo termino, me la paso repasando este tipo de cosas, las reglas, y la caracterización (sé que puedo romper varias, y de hecho, lo hago). Pero no quiero que la gente piense que por mi edad mi libro no puede ser tan bueno, como lo he leído en algunos de tus comentarios. Espero algún día puedas darme alguna crítica. Saludos.
Alejandro Quintana.
Hola soy nueva en tu pagina y sobre el tema de Anna; tengo una cuenta en esa paguina y la verdad hay buenas obras pero son opacadas por chicas adolecentes que suben fics sobre One Direction, la verdad yo tambien soy adolecente pero creo que hay obras mejores, llenas de cosas que te enganchan, y llega a haber la ocasion en que mis busquedas se llenan de historias de One Direction y/o creepypastas y casi todas son escritas sobre de x famoso y la chica que lo lee; tambien hay un problema que me molesta; si te por ejemplo metes a la categoria: Fantasia, algunas deberian estar en Fanfic y la verdad es angustiante para mi ya que ese tipo de historias (De magos, Criaturas misticas, etc) me facinan y el que pase eso me cinfunde un poco
La verdad, no soy muy fan de Wattpad, Ana B. Prefiero los clásicos y descubrir autores independientes de nueva generación comprando sus obras en Amazon. No dudo que algo bueno habrá en esta red, pero no me apetece sumergirme en ella para descubrir una margarita entre la basura. Hay demasiada literatura buena como para desperdiciar ni cinco minutos con la mala por una promesa incierta. Gracias por pasarte y comentar, ¡un saludo!
El fenómeno de los “escribas” (No tengo anda contra Anna Tod), todos los escribas, y las hay en edad muy madurita, me duele, me molesta. Los que no entienden nada dicen que es envidia. ¿Cómo no me va a molestar que personas que escriben muy mal, y que además su prosa sólo sea una apología de sociedades patriarcales y materialistas, con mensajes “imbecilizantes” para las masas, sean publicadas como pan caliente por el mero hecho de que las editoriales saben apriori que venden? Es todo patético y lamentable. Lamentable este sistema capitalista, donde todo se mide con la vara del evangelio según San Dinero. El arte y el dinero son conjuntos disjuntos. Una obra literaria es una obra de arte. Estas cosas son horrores. Como artistas a través de la letra buscamos generar conciencia, hacemos revoluciones, interpelamos, peleamos por derechos. Por mi parte, tengo varios libros escritos y jamás envié ni uno a editorial alguna porque no me importa el tema de la venta, ni de la fama. Mi único interés es que los mensajes de mi prosa, lleguen a destino. Ese objetivo lo he visto con creces. No me interesa tener un best seller, me interesa hacer buena literatura, mejorar cada vez más. Yo por mi parte ya superé la etapa de estupefacción al ver como la pionera, E. L. James, con esa prosa horrenda, llegó hasta donde llegó. Y fue la puerta de entrada a un cúmulo de párvulas que siguieron los pasos, porque las editoriales captaron que eran puntos de venta certeros, aunque escribieran cosas espantosas. Así que hoy, ya no me enojo. “Ante lo que no depende de ti, qué vas a hacer”. Un saludo desde Montevideo-Uruguay.
Más que no enojarse, amiga Anna, es comprender que no todo el mundo que lee lo hace por amor a la literatura o el conocimiento. Igual que hay escritores para todos los gustos, hay lectores de todo tipo. Mi madre, por ejemplo, lee libros de Danielle Steele y de género rosa en general. Nunca ha leído en la vida y ahora lo hace porque al estar jubilada tiene más tiempo. Dice que leer antes de dormir “le cansa la vista” y la ayuda a conciliar el sueño 🙂 Su interés por la literatura es CERO… pero lee libros.
El sector de los libros es muy amplio y cabe todo. Siempre habrá lectores que, como mi madre, solo quieran pasar el rato antes de dormirse o mientras van en el transporte público. También habrá quien lea porque le apasiona la lectura; pero dentro de estos grupos habrá quien prefiera una buena prosa a una gran historia, habrá quien prefiera el contenido sin importarle la forma, habrá quien… en fin, creo que me he explicado 🙂
El éxito de un escritor pasa cada vez más por ser capaz de encontrar a su propio grupo de lectores fieles, por reducido que sea. Por lo que veo, tú has logrado esa clase de éxito y estás satisfecha con él, por lo cual te felicito y te doy la enhorabuena… ¡no es fácil! Muchas gracias por pasarte y comentar, espero que este comentario sea el inicio de futuros debates. ¡Un abrazo!
Alejandro, ayer justamente platiqué con mi pareja sobre tu artículo, que me pareció bastante bueno y objetivo. Él , al igual que yo, hemos trabajado por años en el medio editorial en diversas áreas, tanto como escritores como dibujantes, editores, parte del consejo editorial, entintadores, etc., por lo cual sabemos y entendemos que es un negocio y que primero debes buscar agradarle al público, sin embargo, creemos (y siempre hemos creído y comprobado) que el público no es estúpido como le quieren hacer creer. La gente reacciona a lo que le dan. Y si le dan basura, una gran parte de ese público la aceptará al no hallar contra qué compararla. Esto lo comento porque desde hace ya varios años, la calidad de los contenidos de entretenimiento ha involucionado a niveles alarmantes. Poco a poco, toda manifestación ha ido decreciendo y cayendo en una especie de “molde de estúpidos”, en el que se celebra la pedantería, el mal gusto, el sexismo, la cursilería y la falta de ganas de pensar. Y el medio literario no es la excepción.
Mi novio ha escrito cuentos y un par de novelas. Algunos de estos cuentos hemos tenido la oportunidad de publicarlos en formato de cómic, con un agradable y buen resultado. A la gente les ha gustado mucho lo que hacemos, a grado tal que incluso a una década de haber publicado el primero, la gente aún nos recuerda. Sin embargo, de un tiempo a la fecha, nos enfrentamos al igual que muchos a que los editores nos cierren las puertas por hacer cosas que ellos consideran “demasiado complicadas”. Sin ir más lejos, el año pasado publicamos en el diario “Pásala” un cómic que ellos nos pidieron. La premisa era simple: un glorioso boxeador sufre un accidente y pierde todo lo que poseía, quedando en la calle y enfrentándose a que ahora está solo, sin dinero y teniendo que comenzar de nuevo en el barrio que lo vio nacer y al cual llegó a despreciar. Bajo esa premisa, mi novio comenzó a escribir el guión, dando a la historia un toque de thriller urbano. Sin embargo, los editores nos llamaron para pedirnos que el protagonista no fuera tan amable, sino que fuera más “picarón, más macho, que fuera algo trácala y siempre se saliera con la suya”. Acto seguido me pidieron que dibujara “más chichis y más nalgas” (sic.) No me espanta, la verdad, he dibujado porno puro. Pero el modo en que lo pidieron, por curiosa razón que desconozco, se me hizo… tan peyorativo… El caso es que metimos escenas de sexo, y acto seguido nos pidieron que ¡no fuéramos tan subidos de tono! Y es que según esto, al público le gusta ver mujeres sinuosas semidesnudas pero no podeos rebasar la línea de la moral, ya que no es un objeto (es decir, no es un objeto pero ponla decorando con su cuerpo sin que haga nada…) y finalmente, nos dijeron que la historia estaba demasiado complicada, que era como película de suspenso y ellos querían algo como en Sensacional de Barrios. No llegamos a ningún acuerdo y lo dejamos.
Como este ejemplo, veo muchos a diario. Del mismo modo, mi novio ha intentado publicar su novela, pero se ha hallado con que, sin más explicación que “por el momento no aceptamos material”, las editoriales la rechazan. No hay una crítica, no hay un “mira, te falta esto, podrías mejorar con lo otro”. Incluso nos da la impresión que así como llega la tiran a la basura y mandan la respuesta en automático. Y esta es la razón por la cual te escribo:
Si somos muchos intentando escribir, y sé que muchos de aquí, (tú incluido), poseemos la calidad para hacer algo interesante ¿por qué no juntarnos? Ante la falta de oportunidades, mi novio comenzó su propio negocio como encuadernador y le va bastante bien, la propuesta que hago, para ti y para quien guste, es: si tienen algún material, podemos imprimirlo, diseñarlo, encuadernarlo y ponerlo a la venta. Nos vamos a mitades de lo que salga por unidad y así como vamos vendiendo, vamos publicitando uno al otro. No sé qué opines, porque sinceramente, esto del fanfic que se volvió best seller me suena más a que todo fue prefabricado de la nada. He leído fanfics realmente buenos de muchas series y por muy populares que sean (como el famoso “No name” de Attack on titan) no se vuelven libros formales, aunque en el submundo, son verdaderas obras de culto.
Pero pues si les interesa, podemos hacer algo, para no seguirnos quejando de que no nos hacen caso, ¿qué opinan?
Una reflexión lúcida y que proviene de la experiencia, ya que habéis sufrido en propias carnes esta premisa actual de que a la gente hay que darle las cosas ya masticadas y digeridas. Te agradezco mucho el comentario, Romy 🙂 No es que esto sea nuevo, el dilema entre calidad-comercialidad se ha dado siempre. Pero es que últimamente ya es incluso escandalosos lo que pretenden hacer pasar algunos como contenido de entretenimiento… también creo que si a la gente le das buen contenido, consume y exige material de calidad. De ahí la reflexión que he hecho por ahí, en otro comentario, que toda esta idiotez generalizada parece una maniobra orquestada desde quién sabe dónde para mantener a las masas embrutecidas y que no piensen demasiado.
Yo opino que lo bueno no tiene por qué ser aburrido o tan críptico que solo lo comprendan unos pocos eruditos. El equilibrio en su justa medida es lo ideal: material que contenga profundidad, que haga reflexionar o que ponga un tema en evidencia, que al mismo tiempo sea digerible. Ni me gusta el contenido para descerebrados, ni me gusta el que parece hecho para mentes privilegiadas.
Toda propuesta que apoye la difusión de contenido bueno e independiente (esto cada vez va más de la mano) siempre es interesante. Escríbeme en privado desde aquí y vemos qué se puede hacer. Muchas gracias por pasarte y comentar, Romy 🙂 Un saludo…
La sociedad actual fomenta el desarrollo de la literatura comercial, solo basta ver el bum publicitario en casi todos los medios de comunicación, de literatura mas cercana a la programación televisiva de canal 5, es decir: memorias y/o confidencias de políticos, biografías de deportistas destacados y personajes de la farándula, a quienes, algunos oportunistas quieren inmortalizar; no tanto por lo atractivo de su pasar en esta vida, como por la rentabilidad que de ello pueden obtener.¿Los castigados? Obviamente, los que buscan un espacio en el cada vez mas monopolizado mundo literario, con el sueño de dar a conocer su arte, y si es posible de paso, conseguir una mínima rentabilidad, que sirva de consuelo al magno esfuerzo que ello implica.
Pero Rume, eso siempre ha sido así… los artistas nunca lo han tenido fácil y siempre ha habido quien se ha subido al carro de lo comercial para poder subsistir. Siempre ha habido “vendidos” y siempre ha habido “rebeldes” 🙂 Hoy en día, por suerte, incluso los rebeldes pueden aspirar a conseguir rentabilidad conservando la independencia. La clave reside en encontrar un pequeño nicho de lectores. Es más, creo que el futuro de los contenidos de calidad pasan justo por eso, pues los contenidos para masas serán cada vez más pobres. Gracias por pasarte y por comentar. ¡Un saludo!
El eterno dilema, literatura comercial versus literatura de calidad, etc.
Respecto al fenómeno fanfic, en mi blog llevo meses haciendo un seguimiento en clave de humor principalmente de 50 sombras de Grey y de crepúsculo, así como de otras novelas del género Young Adult, por pura diversión, porque la verdad es que dan muuucho de sí.
La conclusión que he sacado después de estudiar el tema es que estos libros tienen algo que es capaz de llegar a personas que son lectores ocasionales, no lectores asiduos, por eso tiene esos niveles de ventas tan espectaculares.
El mérito no se lo niego, si fuera tan fácil tener esos niveles de éxito, lo haríamos todos (¿quien no querría hacerse millonario vendiendo un libro?), y la cantidad de fanfictions que hay es infinita, no hay más que entrar en Wattpad a comprobarlo, pero no todos pegan el pelotazo.
Aunque para cualquier lector mínimamente formado quedará patente que la calidad literaria de estos best seller deja mucho que desear.
Ahora las editoriales están usando estas redes sociales literarias para captar a quienes consiguen mucho predicamento en ellas. Así no arriesgan, se aprovechan de la base de lectores que ya tiene el lector (estamos hablando de cientos de miles de lectores) y de una temática que saben que vende (en el caso de 50 sombras de Grey, lo que hicieron fue remozar un fanfiction de la saga Crepúsculo, pero tuvieron que cambiar la temática por el tema de los derechos de autor).
También pienso que el burro toca la flauta de casualidad, y que lo difícil es repetir el éxito de una primera novela tan vendida, sobre todo por las expectativas que se crearán en torno al lanzamiento de la segunda.
En el caso de esta chica, le veo fecha de caducidad porque la temática está ligada a una boy band, que tienen un tiempo de vida muy corto que viene marcado por el tiempo en que tarden las adolescentes en crecer e incrementar C.I. a niveles funcionales.
Cuando las niñas de su generación crezcan, one direction pasarán al cementerio de las boy band como tantas otras antes.
En el caso de 50 sombras de Grey, al ser literatura erótica, que es un género perdurable, quizás pueda ser que E. L. James pudiera tener nuevos éxitos, aunque personalmente creo que se trata de una moda.
De todas formas estas autoras siempre tienen la posibilidad de publicar sus nuevas obras que no pertenezcan a estas temáticas bajo seudónimo, como hizo J. K. Rowling con la primera novela no “Potteriana” que escribió.
Muy cierto, R.R. Un debate casi tan viejo como la humedad 😀 Tu conclusión es acertada, creo. El lector que es asiduo no se suele acercar a según qué libros porque parece como que “huele de lejos” lo que viene dentro. En cuanto al mérito, qué duda cabe. Con lo difícil que es hoy día que en Facebook o Twitter alguien te haga un poco de caso, conseguir el impacto de esta chica es un logro. Vaya… si yo fuera publicador no me lo pensaba dos veces, porque a lo que huele lo de esta muchacha es a dinero pero de muy lejos.No es de extrañar que los caza”talentos” estén al día de lo que se cuece en la red.
Y yo, insisto, creo que cuando pase el boom de esta chica, la primera aliviada será ella misma… no creo que volvamos a saber de ella, con o sin seudónimo. Y de la boy band… bueno, los que llevamos un tiempo ya arrastrándonos por la Tierra, ya sabemos lo que pasa con ellos. Que uno es de los tiempos de Milli Vanilli, joder 😀 Un placer tenerte comentando por esta, tu casa, R. ¡Un abrazo!
Solo dos cosas: no creo que el marketing se cargue la carrera de un escritor, entendiendo que un escritor, en el verdadero sentido de la palabra, es una persona con la suficiente capacidad para saber reaccionar correctamente si le ocurre lo que a Anna Todd, cosa nada probable.
Y otra: pertenezco a la industria editorial y eso de que solo pretendemos obtener rentabilidad es algo que, al menos, habría que meditar un tanto. Baste quizás como ejemplo mi propia rentabilidad de la que prefiero no hablar; el verdadero editor es mitad empresario y mitad artista y su idea de la rentabilidad es un tanto diferente; la busca y mucho,por supuesto, pero no le sacrifica alguno de sus principios.
Rafael, la clave la has dado tú mismo… “un escritor en el verdadero sentido de la palabra“. Pero estoy seguro que sabes lo difícil que es reorientar una carrera, literaria, musical o del tipo que sea, que ya se ha encaminado en una dirección concreta. Cambiar el concepto que el público tiene de uno es complicado. Por eso recomiendo la cautela y diseñar estrategias coherentes con la propia “marca personal“.
Cuando hablo de industria editorial me refiero a los monstruos del sector. Multinacionales con capacidad de penetración en los mercados a nivel global, con presupuestos millonarios para marketing e infraestructuras, con poder en los medios masivos de comunicación. Que un editor más o menos modesto intente publicar obras más o menos comerciales para rentabilizar su negocio es lo lógico y lo defiendo a ultranza. No me verás ponerme de parte de un escritor que se niega a alterar una coma de su texto porque la considera una sagrada obra de arte 🙂 Pero Rafael, dudo que tu editorial pueda englobarse dentro de la industria.
El sector editorial es amplio y cabe todo. La industria editorial es parte del sector. La parte más visible y tal vez la más poderosa, pero sus métodos de trabajo y sus sistemas de producción son… pues eso, una industria.
Y en una cosa sí que no estoy para nada de acuerdo contigo: el verdadero editor no es mitad artista y mitad empresario. El verdadero editor es un romántico empedernido que obligatoriamente necesita ser al menos un 10 % empresario. Pero tiene un 90% de artista 😀 Un saludo, Rafael, gracias por pasarte y comentar…
Estuve “hojeando” Wattpad por mucho tiempo, buscando alguna “gema oculta”, pero nada, no encontré ni un relato medianamente interesante. Tal vez no busqué suficiente…
Vi que las novelas con mas éxito, lecturas y likes, son fanfic, contados en primera persona, presente. Siempre es sobre, “chica buena y tímida conoce chico malo y popular”. Y siempre, siempre, la protagonista tiene entre 17 y 20 años y el libro comienza en el primer día de clase, puede ser del último curso de bachillerato o primer año de universidad.
Leyendo tu artículo Alejandro, me picó la curiosidad….!y vaya sorpresa! el famoso libro de Anna Todd cumple exactamente con todas estas características que anoté antes.
Cada vez mas, en la literatura, se va dando lo que hace mucho, o siempre, se dio en el cine y la música. Exito de ventas no va de la mano con calidad. (Salvo algunas exepciones, claro) La idea es repetir una y otra vez fórmulas preestablecidas que no sean muy complicadas y que den garantía de éxito. Cada vez vemos menos escritores, que arriesgando e innovando, consigan un éxito de ventas.
Otra reflexión sobre esta nueva era de “novelas juveniles” para un público específico de entre 15 y 23 años mas o menos. (Léase, “Divergentes”, “Los juegos del hambre”, “Crepúsculo” etc.)
Cuando yo era niño no había, o yo no conocía, literatura para ese rango específico de edad. Entonces pasé directamente de leer literatura infantil (Julio Verne o Salgari) a libros para adultos. Entonces con 13 o 14 años ya leíamos a Vargas Llosa, Fitzgerald, Nabokov, etc. Pregunto: ¿Que va a ser de la capacidad crítica de estos chicos que hoy leen estas cosas, cuando sean grandes? Aquel que nunca ha leído a los grandes clásicos, ¿podrá alguna vez, en el futuro, diferenciar la buena literatura de la mala? ¿Serán capaces, siquiera, de enfrentar un libro adulto e inteligente?
Muy interesantes cuestiones, amigo Adrian… yo también me lo planteo algunas veces y mis conclusiones son variadas. Depende del día, creo que la especie humana no tiene remedio y se encamina a una especie de edad oscura peor que la edad media. Me imagino una especie de futuro idiocrático en el cual lo más culto es saberse el elenco artístico de toda la saga X-men.
Y hay días en los que me digo que incultura la ha habido siempre, que a los que vamos para viejos nos parece que todo tiempo pasado fue mejor y, a pesar de eso, la humanidad sigue avanzando. Siempre habrá quien lea a Anna Todd, siempre serán muchos más que los que lean a Nabokov y Fitgerald… pero creo que nunca faltará quien lea Cien años de soledad o vea la película Amanecer de Murnau o escuche la Tocata y fuga de Bach y se emocione hasta la lágrima. Estamos hechos de cierta pasta. Y esa pasta no caduca.
Al menos, hoy toca pensar eso… 🙂
Un abrazo, Adrian, gracias por pasarte y comentar…
¡Qué razón tienes, Alejandro! Te confieso que estos casos de literatura-espuma me deprimen un poquito porque hay tantxs buenxs escritorxs que no tienen oportunidad alguna y al final lo que se priman son contenidos que no nos aportan gran cosa. No obstante, este mismo caso lo he visto en la música o en el cine (otras dos de mis grandes pasiones) desde que tengo memoria… así que no es nuevo para mí.
En cualquier caso, tu post me anima a seguir dando lo mejor de mí y a continuar trabajando cada día. Desde el principio, he tenido muy claro lo que quiero y poco a poco lo voy consiguiendo (tomo palabras de tu texto):
-Atraer un selecto grupo de lectores identificados con mi estilo y con la calidad literaria de mi obra.
-Autopublicar mis libros y prescindir de los métodos tradicionales, creando por mi cuenta una carrera literaria independiente.
-Construir mi carrera con pies de plomo.
Por eso estoy en tu TDI y muy contenta de formar parte de él, de haber conocido gente estupenda dentro y contar ahora con multitud de recursos de calidad 😉
Saludos y gracias por arrojar luz sobre estas cuestiones que pueden sernos de interés en nuestra carrera como autorxs 🙂
Muchas gracias, Eleanor. Para mí es un placer tenerte en los cursos y talleres 🙂 Tienes muy clara tu visión de hacia dónde te encaminas, es de verdad admirable. Me alegra que hayas elegido este camino para orientar tus pasos y pisar con cuidado. Tal vez no sea la forma más rápida de avanzar, pero te garantizo que es la más fiable. Un abrazo, gracias por comentar. ¡Y paciencia! Lo que tiene que llegar, llega a su debido tiempo 😉
Hola Alejandro,
Me ha parecido muy interesante tu post y los comentarios posteriores.
Mi reflexión al respecto, estamos en una sociedad dónde se valoran otras cosas y no precisamente los contenidos de cualidad. El éxito de esta chica es un reflejo, igual que los libros de “personajillos” televisivos que lo único que hacen es vender sus miserias, acaban escribiendo un libro (él o otros) y lo peor que se convierte en uno de los más vendidos…
Todo esto nos tendría que hacer reflexionar sobre cómo somos como sociedad y lo qué se busca.
Me ha parecido muy interesante lo que dices de decidir qué clase de escritor queremos ser, pero a continuación me surgen las dudas. Los escritores incluso los aficionados como yo misma, lo que queremos es que nos lean…¿cómo compaginas ese ansía porque te lean con resistir a cantos de sirenas como le ha podido pasar a esta chica o a otros?
Sí, a mi me gustaría tener publicado un libro, que se reconociera su calidad, la intensidad de lo que escribo…pero de verdad no hay ese puntito de deseo de que me lean muchos…ha de ser muy difícil resistirse. Yo cuando se critica a los best sellers pienso que alguna cosa deben tener para que se lean y eso, ya me parece importante para valorarlos. No es fácil conseguir que la gente lea, ¿o si?
Contradicciones y reflexiones que se me han sugerido con la lectura de tu post.
Un saludo
Tienes toda la razón, Conxita, algo tendrán los best seller para que los lea tanta gente 🙂 Pienso que se desprecia muy a la ligera cierto contenido que puede tener su valor, aunque solo sea el de rescatar una técnica literaria que consigue atrapar la atención de los lectores.
En mis cursos digo que la prioridad número uno del escritor es conseguir que los lectores lleguen al final del libro. Si no es así ¿de que sirve un mensaje profundo? 😀
Por eso mi forma de enseñar narrativa está a medio camino entre las técnicas para conseguir atrapar al lector… y el diseño de una estructura profunda que contenga algo más que “una historia entretenida“. Lo cual también es muy loable ¿por qué no?
Y en cuanto a los cantos de sirena… bueno, nunca es fácil resistirse a la tentación, está claro. Pero ayuda mucho el tener una estrategia de publicación y mantenerse firme. Una estrategia que sea flexible y adaptable, pero que permita discernir entre lo que encaja en ella y lo que la perjudica. Un saludo, Conxita, siempre un placer tenerte en esta casa… que es también la tuya, por supuesto 🙂
Hola!!! Me parece irónico, que una chica saque de la galera un trabajo que la catapulta a la fama (y algo de dinero) sin haber escrito jamas, o soñado con hacerlo. Y peor si el trabajo es mediocre y sin mensajes claros. Otros muchos, en los que me incluyo, escriben denodadamente toda su vida, esperando que algún editor se interese, y no lo logra. Otra cosa…me consta que muchos editores, no todos, atienden y dan prioridad a los que son conocidos o , a los que van de parte de “fulano”, los ignotos que no tiene “padrino” pueden estar “remando” toda la vida…sin llegar a buen puerto. Un saludo a todos.
Hola Fernando, no te falta razón en eso. Ten en cuenta que una editorial es también un negocio y los editores lo que desean es correr el mínimo riesgo. En el caso de los autores noveles, el riesgo suele ser alto y es complicado que un editor se interese. Claro que hay casos salvajes de injusticia literaria, pero otras veces puede estar justificado. Me explico…
Desconozco tu obra, por eso no puedo hablar en consecuencia, pero la clave para que los editores se interesen por una obra es que sea tan condenadamente buena que no pueda pasar desapercibida. Otras veces es cuestión de estrategia de publicación: no se trata de llamar a todas las puertas a ver quién abre, si no de llamar a las puertas adecuadas.
Pero la clave es siempre la misma. Escribir algo que merezca la pena ser publicado. Luego pueden influir otros factores, pero ese es el factor decisivo.
No lo estoy diciendo por ti, ya que reitero que desconozco tu obra y me es imposible saber si es el caso o no… tu comentario me ha servido de pretexto para explicar esto. Pero a veces hay autores que se quejan de la dificultad de publicar, lees lo que te envían y ves que, tal como está su obra, es impublicable. Algunos de estos autores se reafirman en su postura y siguen insistiendo, cuando lo que necesitan no es encontrar al editor que les publique, sino una revisión a fondo de su obra (y en muchos casos de su técnica narrativa).
Gracias por pasarte y comentar, Fernando. ¡Un abrazo!
Tremendo artículo:
Me quedo alucinada con todo lo que comentas sobre el libro de la chica adolescente. Me doy cuenta desde hace algunos años que intentan vendernos este tipo de contenido y se nota que buscan que la gente este menos despierta. Lo veo en varios medios de comunicación, no sólo a través de los libros.
Y como dices suben como la espuma y luego la caída es tremenda, pero más allá de esto, me doy cuenta que poco a poco van haciendo que una parte de la población se acostumbre a esto, pero afortunadamente no todo el mundo está en la misma onda.
Nos queda mucho por hacer y escribir (poner bien los pilares o las bases de nuestra narrrativa y con “paciencia” llegar hasta donde sea necesario llegar. No todo esta perdido.
Un saludo y buen finde 🙂
Así pienso yo también, Euri… creo que existe una consigna desde ciertos poderes que promueve contenido de baja estofa para mantener a la gente idiotizada… pero esto es muy antiguo ya. ¿Es de Julio César el famoso “pan y circo“? Pues cuando hay poco pan, se hace mucho circo y creo que eso es lo que pasa hoy día.
Aunque también es posible que no haya maniobra alguna y todo se deba a la capacidad del ser humano para autodestruirse por su propia estupidez 😀
Por suerte, como bien dices, no todo el mundo está en esa onda y no todo está perdido. Un abrazo, Euri ¡gracias por comentar!
Estoy de acuerdo con vosotros, pero también entiendo todas las posturas. Hablamos de escribir para propio deleite y ver de construir algo transcendente que pueda transcurrir en el tiempo y la critica más entendida y sobretodo el público le guste y disfrute, y hablamos de otro tipo de género para aprovechar el momento. A efectos económicos ojala cualquiera de nosotros diese un pelotazo como éste. A mi me gustaría. No he leído el libro y seguramente no lo leeré, pero ya me gustaría llegar a hacer esto sin comerlo ni beberlo. Saludos.
Alberto, es una cuestión de estrategia… tiene que ver con lo de comerse el caramelo antes de hora. Si algo así encaja en una estrategia de publicación orientada a ganar dinero y a la escritura comercial, estupendo ¿por qué no? Como dices, es un pelotazo.
Pero si tu intención es crearte una reputación a largo plazo y crees que el dinero es la consecuencia de haber sembrado un campo abonado, un éxito así puede ser un golpe de mala suerte. ¿Cómo te percibirán a partir de ese momento tus lectores potenciales? ¿Encaja este éxito en tu estilo literario o se ha producido por una coincidencia puntual entre oferta y demanda?
Es mejor sopesar pros y contras con cuidado. Claro que, cuando uno se equivoca, siempre puede sacar partido a la situación 😉 Gracias por comentar ¡un abrazo, Alberto!
Acabo de descubrir tu blog, y me parece muy interesante. Soy un escritor novato con una novela ya publicada. Hace un mes que terminé un nuevo libro, que descansará un tiempo en el cajón antes de hacer la última revisión y enviarlo a la editorial. Sé que todavía me queda mucho por aprender. Tus consejos me van a venir estupendamente para avanzar en mi aprendizaje. Así que muchas gracias.
En cuanto a este post…, me da un poquito de pena que la industria editorial encumbre libros mediocres, con una calidad literaria muy justa, y haya escritores con novelas estupendas que no consigan encontrar una editorial que apueste por ellos simplemente porque los agentes literarios y los editores tengan más encuenta el dinero que pueden generar personajes muy conocidos, que ni siquiera tienen porqué que ser escritores (un presentador de televisión, un personaje de la farándula, un actor…), que la calidad de la obra a enjuiciar. Como digo, me da mucha pena que la literatura en sí no sea lo más importante a la hora de valorar la publicación de un manuscrito. Pero soy consciente de que esto funciona así, me guste o no. Y en parte… incluso llego a entender a los agentes y las editoriales. Pero insisto, me da mucha pena.
Hola Miguel, gracias por pasarte y comentar. En realidad, esto de publicar y vender libros es un negocio. A algunos escritores, cuya vertiente artística la tienen en alta consideración y su amor por la literatura es muy alto, les causa rechazo todo lo que esté relacionado con el negocio de su obra. Entre estos y los famosos a los que la literatura les importa poco, pero el dinero les atrae como una llama a una polilla, existe un amplio margen. Ahí es donde nos situamos los peces pequeños y la mayoría de medianos. Vaya, como decía mi abuela… ni tanto, ni tan calvo 🙂
Es triste la falta de consideración que se tiene hacia los nuevos autores que pueden aportar algo de color al panorama gris de lo comercial hoy en día, aunque no hay que desesperar. Por lo que veo has autopublicado un par de obras, deseo que tengas mucho éxito y puedas hacerte un hueco en ese vasto espacio entre extremos.
Esto ya es pura pasión por la narrativa… en la obra que estás publicando en tu blog, El viaje de Claudio, prueba a hacer lo siguiente: en el capítulo 1 cambia el orden del principio. Es decir, la segunda parte de ese episodio pásalo al inicio, y cuando llegas a “Si es que estaba vivo“, empalma la primera parte con la frase “Lo último que recordaba es que llegó a su casa sobre las diez y veinte de la noche“. ¿Mejor así? 😉
Si atrapas la atención del lector desde la primera línea, mejor que si la atrapas en la primera página. Es más comercial y no tiene por qué afectar a la calidad de lo que se escribe ¿verdad? Este es el trabajo que tradicionalmente debería hacer un editor de mesa, de los que quedan pocos. Así nos va…
¡Un abrazo, Miguel, bienvenido a la tribu!
“Latidos del pasado” sí es una autopublicación, pero no mi último trabajo, “Río”, ya que tuve la “suerte” de que una editorial madrileña apostara por esta novela: Bohodón ediciones. Lo presenté en librerías más o menos importantes de varias ciudades del norte (Elkar de Pamplona, Santos Ochoa de Logroño, La casa del libro de Bilbao…) y estuve firmando en la feria del libro de Madrid en la casetea de Bohodón el año pasado. Pero como digo, soy consciente de que me falta muchísimo por aprender. Poco a poco, el camino es largo.
En cuanto a tu sugerencia sobre le primer capítulo del “El viaje de Claudio”, creo que tienes razón en cuanto a cambiar el orden. Cómo tú propones atrapa al lector desde la primera línea. Gracias por el consejo.
Pues enhorabuena, Miguel, que una editorial apueste por ti es un logro muy destacado y más hoy día que abunda tanto la figura del autor independiente 🙂 A partir de quí, a crecer y evolucionar, pero has dado verdaderamente un paso de gigante. Aprovecha eso en tu curriculum cuando contactes con otros editores.
Por otro lado ¡gracias por aceptar la sugerencia! Un placer ser de ayuda. Seguimos en contacto ¡un abrazo!
Bueno Alejandro, creo que el dinero no tiene que pelearse con la calidad,yo si quiero escribir porque me gustaria saber hasta donde soy capaz de tocar emociones y crear reacciones con mis palabras, pero tambien quiero dinero, pues que paguen por mi trabajo los que quieran deleitarse con el. Anna Todd resulto estar en el momento justo con el producto apropiado, de eso ella no tiene la culpa, que disfrute del exito, a lo mejor se anima a querer aprender a escribir, si es lo que la apasiona, un abrazo.
Alvaro
Esa es justo mi visión, Álvaro… a esta chica le han hecho construir la casa por el tejado, eso es todo. Por eso se le puede derrumbar todo en un abrir y cerrar de ojos. Y fíjate, como he comentado en ya en otras respuestas, creo que ella ni siquiera quiere ser escritora. Tan solo se le fue de las manos un pasatiempo inocente. ¡Cómo son las cosas! 😀 Un saludo, gracias por pasarte y comentar.
Interesante reflexión, Álex, y también acertados los comentarios que hasta he podido leer. Esta chica es un paradigma de cómo están las cosas últimamente: oferta y demanda de masas, lo que hace necesario que la calidad se adapte a un público cuanto mayor, mejor. Pero creo que, por mucho que esta sea la realidad imperante, cada persona es como es, y tanto como hay una masa que solo puede leer obras muy simples, siempre habrá un grupo menor (antes mucho más influyente) pero que demandará arte mejor acabado, con una técnica más refinada y un sentido profundo. Por lo pronto, coincido con Álex con que el camino parece estar en aceptar que el mercado es el mercado, pero que pasados los filtros, es posible colorear tus creaciones con calidad de antaño.
Un saludo a todos.
Estamos entonces en sintonía, Cristian 🙂 Muy aguda tu observación, me gusta especialmente lo de que, antes, era mucho más influyente el sector que demandaba lecturas (y contenidos en general) de calidad. La verdadera revolución digital ha sido la democratización de la creación, publicación y promoción masiva de contenidos propios. Vaya, que publicar y difundir los propios contenidos está al alcance de todo el mundo y el acceso masivo a ellos es posible. Luchar contra esta tendencia es imposible. Esto ya no lo para nadie y cada vez irá a más. Y al contrario de lo que mucha gente supone (según mi propia opinión), el éxito verdadero no será llegar a las masas, sino captar la atención de aquellas personas a las que verdaderamente lo que tengamos que decir les sirva de algo. Los nichos y micronichos de lectores son el futuro de los escritores independientes. Ahí queda la reflexión 😉 Gracias por el comentario, amigo. ¡Un abrazo!
Depende de lo que uno quiera. Si uno quiere fama, eso termina pronto, si quiere quedar en la memoria de los seres más cercanos. pues dinero no habrá, pero seguro queda uno como un buen escritor. Ahora bien, pues la lucha se hace. en mi caso me quiero auto publicar llevando todos los procesos editoriales que salen de mi cartera. Mi dicho: Necesitamos del mundo, pero el mundo nos necesita más. 🙂 Necesitamos de editores pero los editores nos necesitan más. en fin.. ¿estaremos locos los escritores autopublicados que pagan la edición de su obra sin importar la fama? todos necesitan un poco de locura como Don Quijote de la Mancha.
Daniel, me gusta mucho tu planteamiento y razonamiento. Sí señor: los editores necesitan más a los editores que al revés. De hecho, hoy día la figura del PUBLICADOR es prescindible, no así la del EDITOR. Son cosas muy diferentes, aunque en el idioma español se preste a confusión. En idioma inglés existe la figura del “editor” y la del “publisher” y claro… se comprende mucho mejor el proceso lógico editorial.
A mí, por ejemplo, me cuesta dar a entender que mi trabajo es el de EDITOR DE CONTENIDO. No publicador, ni corrector de estilo, ni corrector ortotipográfico. A veces es frustrante que no se comprenda, aunque lucho cada día por explicarme mejor…
Pero como bien dices, my friend, hay que estar un poco loco para perseguir los sueños 😉 Gracias por pasarte y comentar ¡un abrazo!
Vaya, vaya. Hasta las editoriales llega la corrupción, o es olfato para ganar dinero. No voy a hablar de ella si no de mi trabajo lo primero se me dijo de mi primer libro fue: Sr. Panamá su libro vale la pena publicarse de inmediato. Firme un acuerdo de co-edición con la editorial norte americana y esperaba la muestra para corrección cuando recibí 600 de los mil libros impresos. Pronto discutí y logre recuperar mis derechos de autor que pretendían quedarse. No transcurrió mucho tiempo y la presentación de libro fue exitosa. Pero fue entonces que amigos escritores empezaron a hablar de adjetivación y otros errores. Un norte americano se suponía haber corregido el libro y las palabras terrorista, guerrillero y otros sinónimos aparecían hasta tres veces por página. ¿Que clase de editorial publica libros así? Viviendo fuera de los EE. UU. hacer una demanda era imposible. ¿Que hacer? ¿dejar de escribir?
Decidí en base a los buenos comentarios de mi escritura era fácil de seguir y que atrapaba el lector hasta el final. Así es que primero decidí que imprimir en papel muy caro y su costo de transporte sobrepasas el costo de imprimir las obras, por lo que la manera de alcanzar más lectores era haciendo libros DIGITALES. Poco a poco forme un equipo pues carezco de recursos y antes de publicarlos contrato el servicio de revisión de mis libros. Y estoy listo para subir mis trabajos a Smashwords una empresa pequeña en el 2009 pero que hoy coloca mis libros en todo el mundo. Bien hasta hoy cuento con ocho obras publicadas y publico tres autores amigos. ¿Pero esto es todo? No, claro que no. Solo he logrado llegar a la tienda y estar el vitrina. ¿Quién me conoce como escritor? ¿Quién sabe como, que escribo o por que escribo? Seguí consejo y publique dos obras grátis. Sin saber de ellas por varios meses de pronto revisando Google analítica; encuentro que esas dos obras se encuentran en la lista de Barnes and Noble como las mas vendidas en idioma Español en EE. UU. junto a nombres como García Márquez y Pablo Coelho esto me dio la confianza que me faltaba y produje 4 obras en el 2014. El logro es ,que algunas personas ya me conocen, pero las ventas continuas sin satisfacerme. ¿Qué falta entonces? Los Mil millones de impactos, ahora trabajo en una nueva WEB, en un blog, landing pages y obtener listado de correo para promover mis obras y vender. Claro mientras trabajo con mis asociados en esto no escribo que es lo que creo puedo hacer. No es fácil y ya quisiera tener la suerte de la chica. Se que voy a triunfar antes de que una editorial se fije en mi trabajo. Si hay errores es por hacerlo directo en este espacio.
Ernesto Panamá
Escritor
Hola Ernesto. No es que hasta las editoriales llegue la corrupción, es que de listos y embaucadores el mundo está lleno. Lo que te sucedió a ti es que te dejaste seducir por el canto de sirena. ¿Una editorial de coedición te dijo que tu obra debía publicarse de inmediato? ¡Ese es su trabajo! Conocen los deseos de los escritores, no en vano este tipo de editoriales (perdona que te lo diga, amigo) se conocen como editoriales de vanidad pues es justo el pecado capital al que apelan para vender 🙂
Sé que eres persona inteligente, tenaz y luchadora. Aprendes de los errores y escuchas. Dejarse asesorar es buen síntoma de que tu éxito a gran escala es posible… tal vez no cercano, pero sin duda llegará. Ernesto: se comienza por un pequeño grupo de lectores. Unas ventas en principio modestas, un par de tropiezos que te enseñan de los errores y después una escalada en las ventas y la visibilidad. Cuanta más gente te lee, más gente te recomienda y más probable que se produzca el efecto “bola de nieve“. Ya has pasado por algunas de estas fases, ahora toca apuntar hacia la visibilidad y ganar lectores. Es buen tema una web, una lista de correo y en definitiva entrar en esa dinámica.
Pero recuerda que siempre, siempre, independientemente de la visibilidad que consigas, de la suerte que tengas, de los medios a los que accedas… lo que te dará TODO es la calidad de lo que escribas. Las estrellas que brillan más, siempre tienen una vida muy corta. Tal vez es mejor brillar con menos intensidad y hacerlo por más tiempo. Por cierto, qué placer estar junto a Gabriel García Márquez en la lista de los libros más vendidos 😉 Un saludo, ¡gracias por comentar!
No es cuestión de como escribes o lo que escribes, sino de lo que vendes y como lo vendes o te lo venden. No sabía nada de esta chica pero si de la locura de 50 Sombras, lo escribo así que a mi si que no me paga nadie por darle más publicidad, empecé a leer el famoso libro hace mucho tiempo y no pude pasar de un par de páginas por lo evidente de la historia, no es por presumir pero no me enganchó la historia era de lo más predecible que iba a ocurrir y sin embargo fué un éxito ¿igual de evidente? Quizás si, por la temática del bets seller, pero no por nada más.
He leído muchas opiniones de personas anónimas tras la lectura de 50 Sombras y reconocen su fascinación por las fantasías sexuales escritas que jamás serán valientes de hacer reales en sus vidas, ya fue el colofón que llegará la película pero ahí casi todos reconocen que nada que ver con el libro. Y es que pocas adaptaciones cinematográficas son fieles a la historia original escrita, aunque 50 Sombras de original poco tenga.
Por otra parte y centrando mi opinión en España primero eres famoso y luego escribes o en muchos casos te escriben un libro y eres record de ventas, eso si el español es muy dado a presumir de la cantidad de libros que lee al cabo del año. ¿Otra fantasía o quizás si sea verdad y lea lo que esta de moda y le dirigen?
Sea como sea a quien nos apasiona la palabra escrita y tenemos suficiente imaginación para montar historias y relatos es muy fácil que pasemos por épocas muy largas de hastío sin tener nada claro para que dedicar tantas horas a nuestro hobbie preferido. Pero por algo será que durante mi vida sea más o menos tiempo de espera siempre vuelvo a escribir, reconociendo que ni idea tengo para que, pero tampoco para quien. Porque no iba a librarme de la hipocresía social de decir que te leen cuando no es así, por suerte no me gano la vida con ello sino tendría un serio problema, ante todo reconociendo la falta de corrección que necesita mi escritura. Por eso sigo considerando que la opción que decidí hace un tiempo de hacer un blog con mis escritos es correcto porque al menos lanzó mis palabras al espacio virtual donde ojos extraños puedan leer y pasar ratos agradables, aunque yo no tenga constancia de ello por sus silencios.
Saludos y gracias por permitirme opinar en esta ventanita aportando mi humilde opinión que por supuesto esta sujeta a debatirse y discrepar.
Hola Núria, muchas gracias por pasarte y comentar… bienvenida a la tribu 🙂 Una cosa: puedes insertar el enlace a tu blog en la firma cuando comentes, así a los que más les interese lo que digas podrán visitarte.
En cuanto al comment… es cierto que es muchas veces una cuestión de modas. Lo que me pregunto, igual que tú, es si estas modas son espontáneas o tienen algo de manipulación. Supongo que serán una mezcla. Como he dicho en otro comentario, las empresas gastan millonadas en estudios de mercado para dar con la fórmula de convertir en viral su campaña… pero al final, es el consumidor quien decide lo que le gusta y lo que no.
Los períodos de sequía narrativa tiene solución, dicho sea de paso. Aunque no seas (ni quieras ser) profesional de la palabra escrita, si lo tienes como hobbie y eso te “libera“, es estupendo y lo puedes potenciar. También hay formas de de llegar a tus lectores. Vale, puede que no sean mil millones, pero está claro que puedes tener tu grupito más o menos fiel y desde ahí… quién sabe. Un saludo, hablamos cuando quieras 🙂
Hola Alejandro! Estamos en épocas de cambio y las cosas insólitas ocurren a cada rato. Los adolescentes están buscando su identidad y no tienen reparo alguno ni les importa el qué dirán, cosa que por un lado veo como positivo. De todas formas, opino que hay que tener algo de respeto por quien lee, no importa si le vendiste el libro o se lo regalaste; la satisfacción que da el que te reconozcan por la calle y te saluden con entusiasmo, diciéndote que han leído tu libro y les ha gustado, o que te llamen para preguntarte donde pueden comprar otros de tus títulos, ya es más que suficiente premio, no importa que no sea un best-seller, ni que eso te vuelva rico y famoso. Hay público para todo. Pero no hay que olvidarse que lo que sube muy rápido, baja más aceleradamente, y para siempre. Me preocupo por el futuro de esta joven. Un abrazo y gracias por tus aportes. Emilio Gallardo, Argentina.
Esa es también mi reflexión, Emilio. No veo mal alguno en el éxito de Anna, hay público para todo y al fin y al cabo todos estamos metidos en una máquina que funciona a base de dinero. Donde veo el mal es en lo que puede sucederle a ella en lo personal o a su carrera literaria. Tal como dices, es fácil morir de éxito y esta chica tiene todos los boletos. Gracias también a ti por pasarte y comentar, Emilio. ¡Un abrazo!
Hace unos meses leí la saga por wattpad, sinceramente no me gusta. El primero me recordó a una mezcla de muchas películas adolescente y luego ya es digno de estudio psicológico. Lo preocupante los fans que tiene detrás que admiran como plantean los problemas en el libro, que desean tener un novio con la misma característica que tiene el protagonista masculino. No sé no lo entiendo, bastante violencia tenemos en la sociedad para salpicarlo con más.
A lo mejor me equivoco, pero fue mi percepción.
Sinceramente, Jossyloes, no podría dar una opinión certera sobre la calidad del libro, solo me puedo hacer una idea por la lectura cruzada que hice de algunas partes. Pero creo que no vas desencaminada. Pienso que mucha gente que la sigue lo hace más por haber conectado con su fantasía que por verdadera afición a la lectura. Por alguna razón, ha dado con la fórmula misteriosa de la conexión emocional con buena parte de una generación. Una generación bastante influenciada por el ocio para tontos, todo hay que decirlo. Pero esa es la fórmula millonaria de la viralidad, que muchos publicistas persiguen y no dan con ella por mucho que inviertan en estudios de mercado 😀 ¡Gracias por comentar, un abrazo!
Bueno,como se dice en Colombia. A esta joven:”Se le aparecio la Virgen”. Por el bienestar de ella prefierira que la Virgen se quedara con ella. De lo contrario, podra tener un duro despertar..Pero como la adivinanza, no es parte de mis dones, no queda, que verla saborear y ojala disfrutar, lo que le esta sucediendo. Mientras,para que la fama no me tome por sorpresa, continuare preparandome.
Hola Nubia Esperanza, gracias por pasarte y comentar 🙂 Yo también espero que todo le vaya bien a esta chica, desde luego. No sé por qué, pero a mí me parece una chica lista, creo que sabrá nadar y guardar la ropa. Si no, como tú dices, podría tener un duro despertar. ¡Un abrazo! Y que la suerte te pille trabajando 😉
La verdad es que, como escritora que publica los borradores de sus obras en Wattpad (porque si, jamás publicaría mi obra pulida, si acaso, publicaría mi borrador más cercano a la obra corregida) me alegro por lo que ha logrado Anna, no porque considere que el que la industria editorial le haya publicado su libro ha sido lo más adecuado (leí su novela y pues, la comparo con las canciones como Gangnam Style, se te pegan, te enganchan, pero son totalmente olvidables) sino porque, al hacerse famosa como una obra originalmente publicada en Wattpad, la fama de esa red social se ve incrementada y, con suerte, en algún momento la misma industria editorial que publicó esa obra se ocupe de encontrar la próxima gema sin descubrir, aquella que está bien escrita pero que no sea tan famosa, vamos, que no haya llegado a esos mil millones de impactos, pero que merezca la pena leerse y la publiquen… Tal vez ese sea el golpe de suerte que necesita mi novela…
No te falta razón, Jessica. Yo soy partidiario de utilizar las redes sociales y todos los medios digitales para una buena estrategia de publicación. Cada vez serán más los editores cazatalentos que busquen sus diamantes en bruto en la red. Lo negativo es que ellos sean los que controlen la situación, creo yo. Yo deseo que a Anna Todd le vaya todo muy bien… por eso lamento su éxito. A veces las cosas no son lo que uno espera y donde parece haber un éxito hay una ruina… y tras muchos aparentes fracasos es donde están los verdaderos triunfos. Como digo, veremos cómo acaba todo esto 🙂 Gracias por comentar, Jessica ¡un saludo!
¡Qué buen debate hoy en el día internacional del libro y del idioma!
En mi pueblo dicen qué ¡de la suerte y la muerte nadie se escapa! El éxito inexplicable de que esta obra haya llegado a la cúspide literaria por decirlo de la mejor manera, obedece a la forma como se vive en estos tiempos. ¡imagínate tú! ¡Sueños de adolescente! Vemos en pantalla grande que hasta los comerciales cargados de estupideces y antivalores para vender un productos son los que ¡arrasan! cuanto más una novela en donde la autora describe el amor platónico que desea vivir con su fans del grupo. ¡y este reconocido, además! No tuvo que hacer mucho esfuerzo literario. Es como decir tiró el anzuelo para ver que agarraba y pescó. ¡Bueno felicidades para ella, que aún no se lo explica! Es literatura comercial. Pero ojo con eso, podría ser el inicio de una aberración literaria. Es decir que todo aquel que quiera dejar el comercio u otras actividades de entrada de dinero y tenga sueños de grandeza en escribir tomé el ejemplo de esta escritora y de esa forma se lance a la fama sin hacer mucho esfuerzo. Es mejor modelar con las normas y principios así cueste un poco más. Porque paulatinamente comienza la aberración literaria y llegará un momento. Que no tendremos buena literatura.
Cordial saludo.
Gracias.
Tu reflexión es inquietante, Deyanira, pero ahí está esa posibilidad. De hecho, acabo de llegar a casa después de estar yendo y viniendo por los eventos literarios del día de libro en Barcelona, mi ciudad. Ya no es solamente la cuestionable calidad literaria de los libros más vendidos del momento… ¡es la dificultad añadida de adquirir buenos libros a precios razonables!
Parece como si algún “extraño conturbenio” quisiera que la gente leyera solo novela ligera de entretenimiento fácil. Ocupan las posiciones privilegiadas en las estanterías y su precio está relativamente más equiparado a la capacidad media de consumo que las ediciones escogidas para los autores de más calidad. Prefiero mil veces pagar 21 € por el último libro de Javier Cercas que 16 € por el de Anna Todd, la inversión no deja lugar a dudas porque es una cuestión de VALOR, no de precio. ¡Pero es que se privilegia la venta de cierto tipo de libros! Eso no se puede negar. Ojalá sea todo imaginación nuestra, Deya… veremos.
Alex, Es que hay situaciones que me ponen muy intensa y esta es una de ella. Sabes que el panorama pinta de color y su sabor es dulce y amargo, mucha gente reflexiona color rosa, en esta oportunidad preferí escoger intensidad y amargo para mi reflexión. Me refería a que este tipo de literatura ¡así!, es lo que prefiere la gente. La culpa no es de Anna Todd, ella cumplió sus sueños, escribió desde el alma sin tener las herramientas y está llenando su bolsillo, culpabilidad de los editores, tal vez, no se; ignoran, o tal vez no se, no les importó editar la tamaña escritura. Ahora bién; Anna debe aprovechar su suerte y seguir escribiendo y ojalá que para el próximo libro se consiga en el camino con un personaje como tú Alejandro, con orientaciones didácticas oportunas y precisas, para que su éxito literario sea exaltado y pueda decir que es una excelente escritora.
Gracias por la confianza, Deya, la verdad es que mi consejo para Anna sería que dejara de publicar y se dedicará a afilar sus herramientas 🙂 Sin embargo, yo creo que los editores hacen su trabajo… ellos pertenecen a la industria editorial y su objetivo es hacer dinero. Le dan a la gente lo que la gente quiere comprar. Puede gustar más o menos, pero no hay que enfadarse, porque las cosas son así. Ya hace tiempo que dejé de luchar contra las cosas y me di cuenta de que para que cambie aquello que no nos gusta, es necesario hacerlo desde dentro.
¿Sabes cómo los romanos partían rocas inmensas que hubiera llevado semanas destrozar a martillazos? Hacían unos agujeros de manera estratégica para llenarlos ¡de agua! Así, el aumento de volumen y presión las abría desde dentro 😉 Anna Todd tendría ahora la oportunidad de decirle a millones de personas cómo ve ella el mundo… no podría influenciar a todas, pero tal vez sí a las suficientes como para marcar una diferencia.
Y todo ello, gracias a una novelita de amores adolescentes. Ese es el poder de las historias. No hay que indignarse, Deya… es mejor buscar el hueco por donde poder colarse y llenarlo de agua.
Bueno Alex, tanto como indignarse no, acuérdate que las indignaciones somatizan el alma, yo soy puro amor, además; no es bueno para alguien que está aprendiendo a escribir. ¡Lo que pasa es que yo habló con el alma Alex!. Cómo me encantan estos debates. Abrazos.
jejeje Deya, ok… dejemos fuera la indignación y abramos la mente al aprendizaje ¿qué se puede aprender del caso de esta chica en relación a cada caso particular? Cada persona extraerá sus propias conclusiones de un mismo hecho. Por eso me gustan también estos debates. Un saludo…
Oír hablar a quienes ya han cruzado la salvaje selva, deja lecciones que pueden salvar la vida. Excelentes notas. Saludo
Y muy buena frase esta, Emilio. Gracias por pasarte y comentar, un saludo…
Muy buena entrada.
A veces es difícil lograr llegar a los lectores, pero en mi caso particular, solo deseo lograr que mis historias hagan disfrutar al lector. Aspiro a tener ese grupo de seguidores a los que les gusta tu manera de contar historias, porque al fin y al cabo, siempre serán lectores fieles a tu pluma.
Un saludo
Opino lo mismo, Elisabeth… y fíjate, estoy seguro que buscando ese pequeño grupo de lectores es como encuentras al gran público. Es algo paradójico, pero el mejor marketing que un escritor puede hacer es ser fiel a sí mismo. Un saludo y enhorabuena por los logros que estás consiguiendo 🙂
Muchas gracias, muchos de tus consejos ne están siendo útiles, pero sobre todo estoy disfrutando de casa momento.
Un placer, Elisabeth 🙂 Me alegro doblemente de ser útil y ameno a la vez. ¡Saludos!
La verdad es que no conocía la historia de esta chica, agradezco que la hayas compartido, a mí personalmente me ha dado una sensación de vértigo. Creo que escribir es una pasión, se haga mejor o peor, quien escribe saca de dentro una parte de sí y la expone al mundo, un mundo pequeño o grande en función de hasta dónde llega, casi siempre suele ser pequeño y a Anna el mundo se le agrandó sin estar preparada para ello, temo que suceda con ella lo que tú ya has vaticinado. A todos nos entristece la historia de tantos que, teniendo talento, han muerto sin ser valorados para que después de su muerte otros se enriquezcan con su obra, injusticias de la vida, o como tú dices, malos enfoques a la hora de dirigir sus objetivos. No sé si alguna vez tendré algo publicable, me queda mucho por hacer y por mi inseguridad innata es difícil que lo lleve a término, pero con personas como tú, que tan bien lo exponen y además generan la sensación de posibilidad, hasta creo que alguna vez pueda ser. Gracias Alejandro.
Yashira, el mundo gira todos los días para todo el mundo. Si otros tienen opciones y posibilidades ¿por qué no ibas a tenerlas tú? 🙂 Yo deseo de todo corazón que a esta chica le vaya bien, pero fíjate… no creo que ni siquiera sea escritora o desee serlo. Lo desconozco, por supuesto, pero diría que es una chica apasionada que se dejó llevar para pasar el rato y provocó un fenómeno involuntario. Si es lista (y nada me indica que no lo sea), hará dinero mientras pueda y se labrará un futuro tranquilo. Veremos cómo termina todo esto… pero mi reflexión es: si esta chica a la que su pasión llevó demasiado lejos ¿qué no podría hacer alguien con una pasión semejante y dirigida a un objetivo? 😉
Hola Alejandro!! No tenía idea de que la historia “After” había llegado a ser tan famosa, la vi un día en wattpad pero leí la sinopsis y bueno… no soy una gran fan del romance y menos aun de los fanfics. Lamentablemente vivimos en una época en que la gente prefiere copiar que crear, esa es la forma en que veo a los fanfics, tal vez sea una opinión cerrada. Cuando tenía 13 a 14 escribía fanfics y siempre había la pequeña sombra de “estos personajes y elementos no son míos”. Aun así tenía más fans de lo que tengo con mis historias originales, atribuyo a que la gente en la actualidad se entretiene más con lo que ya conoce y no se atreve a salir de su zona de confort; no se atreven a explorar más allá de la típica historia de romance “entretenida”.
Confieso que mi mayor sueño es ver mi novela de ciencia ficción convertida en película, no por el dinero, es simplemente un deseo incontrolable que tengo desde que era un bebé de 3 años, de ver a mis personajes cobrando vida mâs allá del papel. Pero respecto a Anna Todd, no tiene la culpa, claro, la culpa la tiene el sistema capitalista y esta era del entretenimiento que sólo quiere alimentar la ignorancia de las personas. Saludos Alejandro! Ya te extrañaba!
Made.
Hola Made, gracias por comentar 🙂 Interesante lo que dices, yo creo que el éxito de los fanfics se debe a que la gente quiere más cuando se identifica con los personajes, por el motivo que sea. Es el mismo principio que rige el éxito de las sagas. Se me ocurre que incluso algún aficionado puede superar a la creación original… no me extrañaría, porque la emoción puede estimular mucho la creatividad. De verdad que estos son tiempos sorprendentes y cualquier cosa es posible 😀 ¡Por suerte!
sí, leido así el tema es similar a lo que ocurre en las teles: los “famosos” , que no lo son por mérito, sino por alguna circunstancia, o que despiertan un cierto morbo en estas tertulias tan nefastas.
¿Será que todavia el morbo nos va? ¿tán básicos somos?
Y claro, un exitazo de golpe te puede mover a uno de los dos lados: al que te lanzará definitivamente al verdadero éxito, -si eres auténtico- o al que te empotrará contra la pared y ya no levantas cabeza.
Deseo todo lo mejor para Anna Todd, y que tenga la suerte de encontrar alguien como tu en el camino que le pueda ayudar. Un abrazo Aex y feliz Sant Jordi.
Hola Tere, un placer tenerte por esta, tu casa 🙂 Pues no lo había pensado así, pero es cierto… muy comparable este caso al de los famosos cuyo mérito para merecer tal fama es más que dudoso. Dicen que una persona inteligente se recupera de sus fracasos, pero una persona estúpida nunca se recupera de un éxito. Veremos cómo le va a Anna Todd, yo también le deseo lo mejor. Un abrazo, feliç Sant Jordi!! 😀
Me alegra comprobar que no metes en el mismo saco a los escritores best seller (la traducción al español suena tan mal que no se ajusta al enfoque que quiero dar) con los escritores fáciles o de recurso barato. El ejemplo de la tal Todd es paradigmático del segundo caso. Sólo es un librito para adolescentes y como tal morirá antes o después (imagino que más pronto que tarde). En la otra parte de la comparación está, por ejemplo, Stephen King. Prolífico y con gran éxito comercial, pero a mi modo de entender la literatura, uno de los grandes maestros. ¿Es culpa de la industria (que por lo pronto ha hecho rica a la muchacha) que la carrera de Ann Todd sea efímera? ¿No puede ser también que este libro sólo haya sido una feliz coincidencia de oferta y demanda?
Claro, Manuel, en estos casos siempre se alían varios factores. Y uno de ellos es la coincidencia entre la oferta y la demanda en el momento exacto. De hecho, creo que el éxito de una campaña puede decidirse según ese porcentaje 😀 Los editores avispados saben que es más efectivo esperar el momento adecuado para hacer un lanzamiento que mil estudios de mercado. Aun en contra de toda lógica, quien decide siempre es el público. Se puede fabricar una tendencia de mercado, pero la última palabra la tiene siempre el consumidor.
Estoy bastante de acuerdo con tu aproximación de Stephen King. Si bien no es santo de mi devoción, hay que reconocer que es un verdadero maestro de la narrativa. La calidad no tiene por qué estar reñida con el éxito comercial, ni muchísimo menos. Un saludo, Manuel, gracias por pasarte y comentar.
Leido esto,Alejandro Quintana, le quita a uno las ganas que le queden de escribir.Un termómetro obvio del aumento de la estupidez social,bien amparada y remozada por el Estado,es la visión de los noticiarios.De la hora que vienen a durar, 30 minutos hablan sobre fútbol, el resto, estupideces variadas sobre cosas inanes.Por fortuna/desgracia,desde hace unos meses vienen sucediéndose docenas de escándalos de vértigo. Vivimos en un sistema que,nada tiene que ver,con una Democracia.
Bueno, Jacinto… no desesperes. Hay que seguir en la brecha y mantener la motivación por aquello que nos apasiona hacer. Al fin y al cabo, lo hacemos porque nos apasiona 🙂
Yo también creo que esta corriente de estupidez supina que nos rodea es una estrategia bien orquestada. En el fondo siempre ha pasado lo mismo, lo que pasa es que hoy día es mucho más escandaloso. Estamos bien conectados e informados al detalle y al minuto de lo que sucede. Cuanto más grande es la mentira, más cuesta meterla bajo la alfombra, eso está claro… un saludo, Jacinto.
Buen día Alejandro, en verdad estoy muy apenado contigo porque no has recibido ningún comentario mio, y es que la verdad he estado demasiado ocupado, espero que ya pronto me atreva a escribir y a dedicarte las prímeras letras mias, espero no defraudarte.
En cuanto a este tema de Anna Tod diría que tiene una suerte de principiante que cayó en un círculo de lectores que no tienen la mínima idea de el concepto de reglas de escritura.
Y estoy totalmente de acuerdo contigo que va a durar muy poco y ya no podrá hacer más.
Te mando un cordial saludo
Atentamente Paul Hernández de Salamanca, Gto.
Nunca es tarde si la dicha es buena, Paul 😀 Bienvenido a la tribu. Tengo que estar de acuerdo contigo, a esta chica se le acercaron muchos lectores que en realidad no buscan literatura, sino saber más acerca de sus ídolos musicales. Ojalá pueda disfrutar de su fama, aunque sea efímera, y con el dinero que gane ahora pueda solucionarse la vida. Porque me temo que la alternativa no es muy deseable… ¡un abrazo!
Tanto en la literatura como en la música y el cine se han dado caso de niños “prodigio” que en cuanto han dejado de ser niños o, lo que es parecido, útiles, se acabó lo que se daba. Esto es uno de los efectos del capitalismo puro y duro. ¿Quién da más?
En efecto, Edurne… algunas veces se convierte a las personas en productos de usar y tirar. Triste. Es mejor ser fiel a uno mismo y no dejarse llevar por espejismos. ¿Cuántos autores perjudican su propia carrera literaria por publicar sin estar maduros? Muchas veces eso sucede por precipitarse en la autopublicación. Pero otras, como el caso de Anna Todd, son las editoriales las que arruinan carreras buscando su propio negocio. ¡Y en el cine es escandaloso los casos que llega a haber! Gracias por comentar, un abrazo.
El mercado del arte es independiente del arte, eso lo dejas bien claro en el artículo. Y estoy conforme con que así sea. También a mí me gustaría escribir un bestseller, para qué lo voy a negar, pero sufro de ambición literaria (estrictamente literaria, no comercial), y esta dualidad de personalidades me afecta todo el tiempo. Admiro a los escritores que se dedican a la literatura comercial porque conocen una fórmula y saben usarla, pero no siempre son mis lecturas predilectas… o casi nunca. Después de todo, no es más que literatura… ¿No?
Rodrigo, no podría estar más de acuerdo. Tal vez esté equivocado, pero yo creo que es posible escribir una obra que se pueda enmarcar en los parámetros comerciales y, al mismo tiempo, tenga calidad literaria. De hecho, creo que las mejores obras de ficción se dan en épocas de fuerte censura. Los autores han de sortear los filtros del poder para poder expresar sus ideas y eso agudiza el ingenio.
Tal vez vivimos hoy día un tipo de censura encubierta: la que propicia esta sociedad del entretenimiento tonto. Por eso, tal vez es recomendable adaptarse a lo comercial para llegar masivamente al público con un mensaje revolucionario, quizá camuflado entre líneas 😉 Creo que ese es el desafío, porque ir contra corriente es en demasiadas ocasiones un fracaso anunciado.
Hay espacio para todo, claro. Siempre habrá un público para los autores de calidad que se salen de la norma establecida. De hecho, lo ideal no es llegar masivamente, sino encontrar tu pequeño nicho de lectores incondicionales. Un saludo, Rodrigo, gracias por comentar.